Según expertos, para saber si una persona padece adicción a la tecnología, deben presentarse por lo menos tres de los siguientes síntomas durante un mínimo de seis meses: "No puedo vivir sin mi Blackberry" Ansiedad excesiva ante la dificultad de usar a diario equipo tecnológico (síndrome de abstinencia), así como inadaptación en diversas áreas de la vida social, familiar y personal.
"Quiero el nuevo IPad" Necesidad recurrente de contar con equipo tecnológico sofisticado y de aparición reciente y cambios importantes en los patrones de vida cotidianos (debido a la exposición prolongada a nuevas tecnologías gran parte del día, el pensamiento gira en torno al momento de usar algún aparato).
"No me hablen cuando juego XBOX" Cambios importantes en el estado de ánimo relacionados con la adquisición o pérdida de equipo tecnológico y cambios en el comportamiento que no se explican por la presencia de algún padecimiento psiquiátrico, enfermedades, ni consumo de sustancias.
"No puedo comer desde que le entró un virus a mi Laptop" Alteraciones en los patrones habituales de sueño o de la conducta alimenticia debido al uso de las tecnologías.
En su búsqueda interminable de satisfacción a través de la tecnología, el tecnoadicto puede terminar frustrado, ansioso y más insatisfecho que al principio.
Fuente: Terra Perú
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